Nota del autor

Si la entrada que estás leyendo carece de imágenes, no se ve el vídeo que teóricamente lleva incrustado o el código fuente mostrado aparece sin formato, podéis conocer los motivos aquí. Poco a poco iré restableciendo la normalidad en el blog.
Este blog es un archivo de los artículos situados previamente en Lobosoft.es y ha dejado de ser actualizado. Las nuevas entradas pueden encontrarse en www.lobosoft.es. Un saludo,
Lobosoft.

sábado, 2 de febrero de 2008

O.K. Corral

OK Corral


Hace poco más de diez lustros se rodó, en pleno apogeo del género, un clásico del western (o, más popularmente, película del oeste). Me refiero a Gunfight at the O.K. Corral o, como dio en traducirse al español, Duelo de Titanes. Precisamente ayer aparecía en todos los medios una noticia, cuanto menos, inquietante. Microsoft, el gigante del software, anunciaba su interés por la adquisición de Yahoo!, uno de los colonos de Internet, que ya existía cuando, iniciada la carrera, alucinábamos con el pine y el talk durante las clases de Metodología de la Programación, antes de descubrir que era más divertido hacer un DoS a Windows 95, o poner un fondo comprometido al compañero en su X Window cuando estaba cerca el profesor. Bueno, nos centramos, que comienzo a desvariar. El caso es que Yahoo! “ya estaba” ahí cuando muchos de nosotros llegamos a Internet, y Microsoft nos ha estado acompañando desde aquellos remotos tiempos del MS-DOS hasta este último Windows Vista que a tantos ha cegado. Entretanto, apareció en la escena Google, un aparentemente sencillo buscador (lo era y lo sigue siendo en su interfaz con el usuario) que, entre bambalinas, gestiona como nadie la información. Y eso, si mal no recuerdo, era la definición de Informática.


Y ahora, ¿con qué nos encontramos? Tenemos tres frentes abiertos este nuevo duelo de titanes.

Microsoft: El primer titán, acusado de monopolio en numerosas ocasiones por las leyes estadounidenses y europeas, hace y deshace a su voluntad. Los estándares son para él guías a seguir y a modificar a su completo antojo, hasta que dejan de ser un referente. Y claro, comienza la batalla. Así le ocurrió con el HTML, con Javascript, o con la JVM hasta que perdió el derecho a usarla tras una batalla legal con Sun. Vamos, que son, a todos los efectos, unos angelitos. Su mayor poder, el económico, sin duda alguna. Hay cosas que hacen bien, a cada uno lo suyo: como aglutinadores de ideas (de otros) son inigualables. Cogen y mejoran, y no hay nada de malo en ello… hasta que intentan hacer propia la idea original. Y patentarla. Por patentar, patentan hasta el doble click de ratón. Eso sí, para el nombre sí que se lo piensan bien: “Time based hardware button for application launch” ;).


Yahoo!: Aquí, el “pobre” Yahoo! es el que más ha perdido. De una posición dominante hace unos años en el ciberespacio, su reinado fue decayendo hasta convertirse en una compañía más (fuerte, sí, pero una más). La regulación de empleo anunciada hace apenas una semana, con la que dejaría en la calle a más de mil empleados no tiene parangón en su historia. Ni en la crisis de las .com, hace seis años, llegaron a tanto. Ni tan siquiera su intento de acercarse a los estándares y las nuevas tendencias, como OpenID, del que ya hablaba hace unos días en Lobosoft, parece salvarles.


Google: El segundo titán. Llegó hace años para quedarse. Tras su aparente sencillez se encuentran trabajando algunos de los CPDs más ponentes del mundo. Sus algoritmos de búsqueda son legendarios. Su forma de tratar a los empleados, y sus oficinas, también. No cabe duda de que es una empresa que invierte en desarrollo, en investigación, que promueve a verdaderos genios de la informática y las telecomunicaciones, y que invierte en los mejores. Alrededor del buscador más usado de Internet, se ha generado una creciente oferta de servicios: un gestor de blogs, tan usados hoy día (Blogger), cuentas de correo (Gmail) con chat integrado (Google Talk) siguiendo el protocolo Jabber. Publicidad sensible al contexto (su grandísima baza) con AdSense, que permite ser integrada en páginas, blogs, que es usada en su correo electrónico (leído por bots que nos muestran publicidad relacionada con los correos que enviamos y recibimos). Una comunidad de programadores en torno a Code Google y a sus librerías de desarrollo. Buscadores de libros digitalizados, grupos de discusión, noticias, búsqueda de imágenes. Y nos quedamos cortos.


Parece, a todas luces, que Google invierte en crear una poderosa comunidad en torno a sí. De esta manera, Google se está convirtiendo en el mayor gestor de información del mundo. Lo sabe todo de todos. O podría llegar a saberlo. Mientras estamos autenticados con una cuenta suya, puede saber dónde entramos, cómo nos movemos, qué nos interesa. Lee, aunque sea de forma automatizada, nuestros correos, sabe lo que compramos, tiene acceso a nuestras bitácoras, vende nuestra publicidad y nos paga por ofertarla. ¿Un mundo feliz? ¿1984? ¿Fahrenheit 451? ¿Acaso una rebelión en la granja? Da un poco de miedo.


Y, sin embargo, al menos a mí me ocurre, Google no despierta tanta sensación de rechazo como Microsoft. Tal vez porque Microsoft ha sido “el malo” de la película siempre, y Google, que nació en un entorno propicio para el desarrollo de las libertades, mucho más anárquico, como es Internet, no termina de dar esa mala imagen.


En cualquier caso, ¿ante qué nos encontramos? Si Microsoft compra Yahoo! no es más que para seguir su guerra contra Google. En los últimos años, Google ha copado la publicidad por Internet, hasta alcanzar el 65% de la cuota total de facturación. Y Microsoft y Yahoo! han perdido en torno a un 6,5%, quedándose en un pobre 31%. Interesante todo esto, a nivel de macroeconomía. Los jugadores, en este mundo globalizado y más unido que nunca gracias a Internet, se posicionan. Y podríamos preguntarnos, ¿en qué bando nos situamos? Posiblemente, en ninguno.


No cabe duda de que, al menos para alguien que ha vivido siempre ligado a la tecnología, las tres compañías han venido ofreciendo suficientes alicientes intelectuales y tecnológicos como para interesarle. Si no fuese por lo que es, Google me parecería la más interesante desde el punto de vista “friki” y de la innovación. Pero es lo que es. Y lo que es, es lo siguiente:


La Human Rights Watch, una organización dedicada a la denuncia de abusos sobre los derechos humanos en todo el mundo, publicó un informe en 2006 sobre la censura existente por parte de estos tres “grandes” de la informática en China. Evidentemente, las razones comerciales son razones de peso para cualquiera de estos gigantes, y China, el país del capitalismo naciente, un futuro prometedor en cuanto a inversiones y clientes potenciales. Si el gobierno chino nos pide que no permitamos a la ciudadanía saber según qué cosas… ¿qué otra actitud podemos adoptar que protegerles y defenderles de ello? ¿Para qué quieren saber qué ocurre en cualquier otro lugar de nuestro globalizado mundo? Con posturas así se pone de manifiesto la calidad moral de estas compañías, y la dictadura económica y mercantil a la que podríamos tender en poco tiempo. Se percibe desde hace mucho. Los políticos no gobiernan, lo hacen las empresas. Los alcaldes corruptos se dejan comprar por las promotoras. Los presidentes de gobierno corruptos, lo hacen por compañías mucho más grandes. O se alían con ellas.


Y no sólo es China, que podría parecer que nos queda lejos. ¿Qué nos parece la existencia de la red ECHELON? Uno de estos días entraré más a fondo con ella.


Ahora, dos titanes luchan por la supremacía en Internet. ¿Ganará alguno? Yo apuesto por Google. Pero la gran pregunta es ¿perderemos todos?

1 comentario: